En Alemania, la educación sexual comienza a impartirse en las aulas desde la educación básica. Los padres que pretendan impedir que sus hijos asistan pueden ir a la cárcel o ser sancionados.
En Alemania, la responsabilidad de proporcionar educación sexual a niñas y niños no es un papel exclusivo de la familia, sino un deber del Estado. A partir de la educación básica, los alumnos comienzan a recibir información sobre la educación sexual.
Por ley, los 16 estados federados de Alemania están obligados a promover la educación sexual en las escuelas, en colaboración con instituciones encargadas de asuntos familiares. Para ello se basan en un catálogo educativo vigente a nivel nacional. La Central Federal de Educación en Materia de Salud (BZgA), creada en 2003 en Alemania como centro especializado de la Organización Mundial de la Salud, es la principal responsable de implementar esas directrices, que, a su vez, son guiadas por los Patrones para la Educación Sexual en Europa (2010).