A Derly Xiomara Duarte Moreno no sólo le ha tocado sufrir un maltrato físico con posibles secuelas permanentes sino también el lerdo actuar de las instituciones que supuestamente deben defender al débil
Se ha vuelto viral en las últimas horas un caso de maltrato contra la mujer ocurrido en el municipio metense de Puerto Rico. El rostro de Derly Xiomara Duarte Moreno muestra las huellas de una agresión a pico de botella que en su contra presuntamente cometió un individuo identificado como Jhon Salgado Sánchez.
Según narró la señora Duarte a Stereonoticias, Salgado se acercó a ella y comenzó a «morbosearla» y dirigirle comentarios subidos de tono e irrespetuosos alusivos a un video íntimo que ella y su entonces marido habían grabado hace cuatro o cinco años y que, accidentalmente, se había difundido por la red.
«A mí eso me ofendió (…) y yo lo empujé. Él cogió la botella que tenía con cerveza y me la puso en la boca. Cuando vi sangre en los labios, lo volví a empujar, luego volvió a ponerme la botella, esta vez en la frente, en donde tengo la herida más profunda que tengo. Ahí se me opacó la cara de tanta sangre que no alcanzaba a ver nada. Y me pegó otro botellazo que fue en donde me hirió en la cara y ahí ‘se me borró el cassette’ porque, la verdad, era mucha sangre, no alcanzaba a ver y me desmayé» dijo Duarte quien añadió que Salgado «se voló» para irse a otro establecimiento público a tomar cerveza en donde posteriormente fue detenido por las autoridades.
Sin embargo, lo que indigna a la señora Duarte es que no sólo su agresor apenas duró un día encerrado sino que, según ella, las autoridades rechazaron recibir su denuncia diciendo que ella «estaba demasiado alterada» y que, una vez «tranquila», se la recibirían pero solo por el cargo no carcelable de lesiones personales.
Es decir que mientras Salgado se encuentra libre, ella está encerrada en su casa temerosa de salir y, de pronto, toparse con su agresor. Aparte de que los médicos le dieron una incapacidad de diecisiete días.
Es una situación que no soporta la señora Duarte pues la fiscal se limitó a decirle que averiguara cuánto costaba la cirugía plástica ya que eso es lo único que le puede sacar legalmente a su agresor, Además nota que su caso no avanza.
«Yo miro que eso está quieto. Como si no hubiese pasado nada. Por eso yo estoy pidiendo a las autoridades justicia porque ese día eso me pasó a mí y así va a seguir pasando y no van a seguir haciendo nada y… mire… con la cara rayada me quedé porque ese tonto ¿de dónde va a sacar plata para pagarme eso?» añadió la señora Duarte con notable frustración.