Un informe de inteligencia militar revela detalles escalofriantes sobre el asesinato de Miguel Ángel López, su esposa y su hijo de nueve meses. Según el documento, López fue asesinado por el ELN debido a su labor de enterrar a las víctimas de la guerra, incluyendo a aquellos asesinados por el mismo grupo armado.
López, dueño de la funeraria San Miguel de Tibú, era conocido por su labor social y su trabajo con víctimas del conflicto armado. Sin embargo, su trabajo también le generó amenazas y presiones de todos los actores armados criminales en la región.
El informe asegura que López había realizado el levantamiento de personas asesinadas por estructuras del Frente de Guerra Oriental del ELN, lo que habría generado serias molestias entre los cabecillas de los grupos criminales en la zona.
La investigación también revela que el ELN habría dicho que nadie podía recoger a los muertos, y que López, al realizar su labor, habría iniciado su «mala hora». El informe resalta la sevicia con la que se perpetró el hecho y asegura que la excesiva crueldad no es casualidad, sino que evidencia la intención del grupo armado de enviar un mensaje fuerte en la región.
El asesinato de López y su familia es solo una parte de la violencia que azota la región del Catatumbo, donde grupos armados ilegales luchan por el control del territorio y las rentas ilícitas. La familia de López, que solo buscó menguar el dolor de las víctimas y sus familias, terminó pagando un precio demasiado alto.
Fuente: Semana
TRAGEDIA EN LA VÍA TIBÚ-CÚCUTA: FAMILIA ASESINADA, INCLUIDO UN BEBÉ